Angeles,
y
Demonios.
2
3
1
,, ron con
J
ácob en Egipto se llaman ánimas.
,,Como el llamarse aquí ánimas no prohibe
"sean hombres con su cuerpo ; tarn poco el
,,llamarse allá
á
los Angeles espíritus, no
im–
" pide sean corporeos.
En
el Apocalipsi ,
aña–
,,de el Santo Doctor , se habla de - un Angel
"con medida ,
y
determinada e?tatura , lo que
"es inacomodable no siendo corporeo.
Si
al–
" guno puede explicar (prosigue) cómo siendo
"los Angeles incorporeos se verifique lo que
"de ellos q-ueda referido ' resta nos diga có–
" mo en la bienaventuranza juntos los hombres
,,á
millares de Angeles resonaron con voz con-–
" corde , no solo en espíritu , sino en espiri–
" tual cuerpo , expresas alabanzas al Señor.''
Finalmente se inclina
S.
Agustín
á
la corpo–
reidad angélica , mas sin tenacidad , diciendo
al sugeto
á
quien .escribe lo que llevamos refe..
rido : <"<"En ·el ínterin , si sabes alguna
cosa:
mas
"congruente
á
la verdad ,
ó
lo oyeres
á
per–
" sonas mas doctas , espero oficiosamente me
"lo propongas (
1 ).
Sobre todo S. Agústin ja-
p
4
.
,,mas
(
r)
Hinc oritur de Angelis qurestio utrum habeant corpora
s,uis officiis, & concursationibus congrua, an tantummodo Spi–
ritus sint
1
S.i
eni m habere di xerimus, occurrit nobis :
Qui
f .1cit A ngelos suos
Spirtus.
Si autern non habere dixerim us,
plus