Discurso IV.
mos ..con, .el P. Feyjoó , que la qüestion sobre
la corpo-r~idad de rlos Angeles. no pertenece·
á
los . dog,~as. Ca~ólicos
(..1) :
que San Bernardo
no nieg
1
alguna probabilidad
á
la opinion que
los
hace
corporeos (
z};
y
que esta
op1n1on,
aunque :-falsa, no es .heré~ica (3). No
solo
son
incorporeos
.los Angeles buen?s, sino tambien
los malos , como luego verémos_
•
.§.
.
Vl.
. 11
El'
ntimero de los
Angeles
-no es co–
nocido , pero ciertamente
es
prodigioso (4 ).
Daniel en
aquel.la. revelacion
en
que · vió al
An–
tiguo en
di.assentado .en un h1cidísimo · trono,
dice , que un milloa oe Angeles le cercaban,
.y
mil ·
millones le
hacian
corte ( 5).
San Juan
Evangelista se explica de
un
modo semejante
hablando ~de Trono del Cordero .,
es.to.es , de
. Jé-
( 1) D.
Thom.
qutest.
16.
de Malo. art.
I.
(2)
B. Berr ard. lib.$. de Considerat.
.
_
1
__
~
•
(3)
Cano
de
Locis Theolog.
lib.5.
cap.
>•
Feyjoo Teat. Critico,
tom.
3.
disc.
1
3.
(4) Currus Dei decem.:millibus multiplex , millia lretantium,
Dominus in eis in Sina in Sanéto.
Psalm.
67.
(5)
Fluvius igneus rapidusque c egrediebatur
a
facie
ejus.!
Mi111a millium ministrabant ei ,
&
decies millies center:ia
millia
ássistebant ei :
J
udicium s·e<r._lit,
&
libri ·aperti sunt.
Dan. 'cap-.7.
v.
10.