.
·~s·
riores ,
y
como los
llama
San
Juan,
la substancia ,y las riquezas de es-
r .Joan.1n.
te
rnundo
~
El que sobre esto anda
1
6.
en
contemplaciones , por mas que
.
diga , no es Christiano ,
y si dice
Ibid.
1
v·
20 •
que
ama
á
su
hermano, es
mentira-
Ibºd
º
.
....
,,
h
1 •
1.
lo.
so; cierra sus entranas
a
su errna-
no ,y no está en él el am@r de
Dios.
Amemos, pues, no con palabras,
si–
no efeétiva,
y
verdaderamente, se...
gun el precepto .del mismo Aposto!.
Y
para que sea sacrificio nuestra
li–
mosna, no demos solamente lo su–
perfluo que nada duele
á
la natura...
leza; arranquemos de lo vivo alguna
cosa: de
forma ,
que suframos por
¡¡uestro hermano ;
y
creamos
que
no hacemos gran cosa en padecer
por
él ,
pues segun
d
precepto del
Salvador, debemos estár dispuestos
aún
á
sacrificar por él nuestra vida.
Primero de pasar adelante so–
bre el precepto de la caridad con el
progimo, tengamos entendido que
el progimo es todo el mundo,.segun
la explicacion de Jesu-Christo
eo
Ja
pa-