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la
abandonan con motivo de es-–
te misterio ; .-los quales -se pierden
Job.vi·5
3
·con los que dicen :
¿
(}omo
puede
darnos
á
comer su misma carne~
Entendiendo estas palabras alego· ..
ricamete..
,
lbid.54.57.
Mí
carne es vianda .,y
mi
san-
gre es bebida
: sonlo verdadera'men-'
te,
y
es necesario comerla,
y
be-·
berla. Jesus lo repite tres,,
.ó
qua~·
tro veces.
i
Y
será alegoría
~
Quién,
ha visto jamás alegoría semejante~
¿
Y
quién jamás ha creído en una ale-\
goría tan poco ·explicada.,_
y
tan mal
descifrada
?
En
una palabra, no
hay·
tal
alegoría :
y~
lo hemos examina–
do ,
y
visto ;
y
no obstante
se
obs–
tinan 'en decir, que lo es. ,¡Qué terco.
es el entendimiento del .hombre ,
y
como se
aferra.ensus preocupado-.
nes
!
Todo 'consiste en que no puede
salir de
aquella
primera dificultad,.
que 'tanto trabajó á los Cafarnaítas:,
lb .d
i,Como
puéde darnos
á
comer su
car--
1
1
•
5
3
•
ne?·
Caen en ella los Hereges,
y
pe-.
recen los..groseros,
y
soberyi0s mur-
muradores.
Y