·4g
con mal deseo:
tlienaventuraaoJ
los
lif!Jpios
de corazon
:
y
lo
tendre~
mos
perfeétamente
limpio,
quan9'
do lo
hu vieremos
purificado
de
to-.
dos los
deseos
sensuales.
Bienaventur~dos
son
aquellos
que
pasan su
vida
mas
en
el due-–
lo,
y
en
una
tristeza
saludable,
que en los placeres que
embria–
gan.
No
jureis
,
decid
Ji,
o
no.
Tarnbien es esto efeél:o de la man-–
sedumbre :
porque
el que
es
pa–
cifico ,
y
humilde, no está
muy
apegado
~-
su opioion , que es
lo
que
hace
a
un hombre
pagado
de
su propio diétamen:
antes bien
di·
ce lo que piensa
con
sinceridad.
Facilmente
perdonara
todas
las
injurias el
que
esta
lleno
de
aquel
espíritu de misericordia,
que
nos
atrae una misericordia
mu·
cho mas
abundante.
El
que es manso ,
y
pacifico
no
resiste
á
la
violencia :
~e
dexa em..
pe.ñar en
mas de
lo_ que
ha
prome~
·
tído.
Ama
a
sus amigos,
y
e~e-
mi·