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os
ca.raéleres
de la
vid
Christia~
na
en general, comienza
desde
aqui
a
señalar '
e
individualizar
los
preceptos particulares,
y da
por
fundamento
de . ellos
esta
bella
re-
gla :
Que la justicia Christiana
debe
M
tt
.
b
..
, -
/
~
d.
a • vf)
~o
so repu¡ar
a
la
de os
ju
zos
mas
per-
feflo¡.
Pongamos
toda .
nuestra
atencion
para entender
la
perfec-
cion de
la
Ley Evangelica ,
que
hemos hecho juramento
de obser-
var:
asi
lo
juramos
y
prometimos
en el sagrado Bautismo.
Para mas
obligarnos
Jesu–
Christo, ha
tenido
la
bondad
de
elevarnos
a
la perfeccion de la jus•
ticia Christiana por tres
distintos
grados.
. En
primer
lugar ;
es necesario
adelantarnos
á
los
Paganos
mas
virtuosos.
Por
esta razon dixo:
iNo
lo
son los
Paga~os?
Como
quien.di-'
ce , vosotros
debeis
hacer aun
mas. Se os habla de
~enospreciar
las
riquezas :
i
los Paganos
no
lo
han hecho
tambien
~
De
que
seais
fie·