(r91)
los
confines de la Judéa _antes de
la
Fie~.ta
de Pe1J,tefostés
,
los
setenta
y
dos Discí:..
pulas
muy
alegres,
y
le
di:xeron :
Señor,
hasta
los mismos demonios se sujetan
á
nosotros
en
tü ·
nombre. Di:x;ol~s ék
Veía
yo
~
Satan,ás
caer
del
Cielo
i
como
un
.relampq.go.Ved ahí,,
os hG d~do ·
el
.
pod~r de pisar
la~ serpjentes
1
y
los
es–
c0rpion~s,
y
toq.a
1~
foerza
dd
enemigo,
y
nada
pod.r~
d.Jñaro~,- Pero
no
obstan–
te, no os
alegrais ele
que los
~soíritt..1s
os
1
•
1
'
d
-+
esta.u SUJ~tos: a egraos
st
~.
qqe
vues-
tros
n01nbres·
estan
escritos.
en
los C{~los~
En.lami.sma hóra saltó
Jesus
de.go–zo
por impulsos
del
Espíritq
Sa.
p,t~ ·, ydixo: Gracias
te
doy
~
·Pad(~ ,
Señordel Cido,.
y
de
l~
.Tierra , porqu~
oc1.il–
taste
~stas <;;osas
á
los ·sabios
y
pn,.1
dentes,
y
las has
revelado
a
los
pequeños.
Sí,
Pa~
dre , porque
asi fue 'd(;!
tu
agrado~
Todas
las cosas me han
sido
entreg~ga~
por mi
Padre :
y
ninguno
sa.beqqién
es el
Hijo,
sino el Padre ; ni
quién,
es el
P~dre ,
si–
no
el l:Iijo;
y
aquel
a
quirn
d
Hijo qui-
iere revelars~lo: Y vol
viendose
despu e~
áda lo~
Discípulos, les
dixo : Bienav rn.–
m-