1
las
man.os,
y
.al
insta11t~ ,
se
engerezó ,
Y.
glorificaba
á
:Qiqs. Mas
.~l
Presidente
d~
la Sinagoga, indignáda porqü~
Jesus
·cu~
1-:aba
en
Sabaclo, di:x,o al
Püeblo:
Seis
dias
hay
d~stinados
para trab?ja~ ; venid
pues en
ellos
á
ser curados
,
Y
110
en
el
di~
d~ _Sabado.
P_ero el Se~or
1e
,respon~
<lió:
Hipóc:ritas,
¿
ha_y
algtiho
entrevo–
s.otros. ,
que
e.n _ el.'§aba_do
no
desate
del
pesebre
un buey ,
o·
S\1
asnq, para
llevar–
le
á. b~be.r?.
'¿:Por
qué, pues;. esta
hija
de .
de Abrahán', á. ,quien Satanás tenia
atada
diez..
y
ocho
áfió~
hace '
110
debía ser .
desatada
de
est~
cautiv~d.o-ep
el
día
de
Sabado·? A
estas
palabras
tji.iedarbn
aver·
gonzados todos sus conúarios :
y
todo
el
Pueblo · se.
llenaba
de ·gozo-
viendole
hacer tantas cosas gloriosas._
,
La -vuelta.
d;
Íds
setenta
y
dos
Disdp.u!os.
·
. _Luc.
10.
17.
h .
.2-4. .
· . ·.
S~m
Lu~s.
ÍJespues de {os s_;_ce;os
p~e-·
cedentes,
y
lecciones que iba_dando
el
Sal–
vador
,
probaNe'l'J1ente creemos
que
V(l)l–
vieron ,
y
vinieron
á
júntqrse.
co~i
él
en:
·
·
los