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los expelen· vuestros hijos ,
vuestro!
exorcitas, que tambien /os expelen
?-Por
eso serán ellos vuestros Jrn~ces,
que o~
condenen ~obr~ esta fa!umnia sacrílega.
,
Mas si ~s por
~l
declo de :Píos ,
por
quien expelo yo
los
demon.ios,, si11 duda
llego
4
vosotros
el
Reyno d~ Dios.
· Porque qüando un hombre
fuerte,
· y
bie11 ;mna<!o
g1.1arda
~q
Eatio ,
todo
lo que posee ·está' seguro, r~ro si
so–
brevinh;ndo otro mas fuerte que él'
le
vence ,
l~
quitará todas sus armas en
que
ponia, su confianza,
y
rep~nir4 sus
des–
pgjqs.
El
que no
~s
conmigo, ~s con–
tr~
mí ,
y
el que no
juntá
conmigo~
q~s
perdida, Qrnmdo
~l
espíritu
inmun–
do
ha
salido de alguq. hombre , anda
por lugar~s áridos buscando descanso;
y
no hallandole ,
dice ;
volveré
á
mi
casa d~ donde
salí.
Y
viniendo
á
~Ila,
la
halla barrida ,
y
adornada! Entonces
I
•
o
/
•
va ,
y toma cons_1go otros siete esp1mus
' peores que él,
y
entrando
en
ella
habi–
tan alli. Asi el ultimo estado de est~
hombre
es
peor que
el ·
primero.
Quando él decia estas
palabra~,
le–
van-