(,1a4)
s:ido ·:
-y
comenzaron
á
pedirle.
que -se
fü
era desu tierra. Pern quandó subia
a
la
bar.ca,
le suplicó
aquel .que habia
~i–
d
o atormentado
.del demouio ,
que ·
le
•
•
I
1"t!t•
p ermitie1~a
estar
en
SlJ
compama ;·· mas
J
esus no le
admitió ,
sino
qu.~
le
dixo;
:vete
a'.
tu
.casa
.con
tus
parientes,
y
co–
municales lo ,que.. el
Señor
ha
hecho
c.ontigo ,
y
como
ha~
tenido
miséricordh
.d~
tí.
El
fue ,
y
era
p.ezó
á
publicar
e11
~De~apoli
las maravqfas
que.
J
esus
habit
hecho
~on
él,
y
todos' se
ad1:11ü:aba11.
llemorroysa. Resurrección
.de·
la
Hija
de
Jayro.
Mat.
9.
18.
h.
26.
Marc. ·5·
2r.
h.
43.
Luc. )6.
40.
hp
56.
San
Lucas.
L1ega·ndo·
Jesus
de vuelta,
pasado el lago
otra
vez
á
Ca.farnaun,
fue -
recibido
.del
Pu.eblo
con
alegria"
porque todos ·
estaban esp~ran<dole.
En–
tonces vino
un
hombre·
llamado
Jayro,
Prindpe
de
la Sinagoga ,
y
eehandose
i
los pies de
J
esus ,
le
pedia
q
u.e
entrase
en -su
casa:
porque
tenia
á
'la
inuerte
a
su
hija
unica de cerca de -doce años
de
edad.