LA PRIMERA EPÍSTOLA DEL APÓSTOL SAN PABLO
Á
LOS TESALONICENSES
a l Co.
1.7.
10
y
ªesperar
á
su Hijo de los
cielos, al cual resucitó de los muer–
bpABLO,
y •Silvano, y dTimoteo,
b2Ts .1.1.2.
tos; á Jesús, •el cual nos libró 'de
á la iglesia de •los Tesaloni-
•
3
~.cb.
15 '
la ira que ha de venir.
CAPÍTULO 1
censes
que es
en Dios Padre y en
d
cp.
3. 6.
el Señor Jesucristo: hGracia y paz
!~í'~: J: ~~·
á vosotros de
Dio~
nuestro Padre
0
'ff~
1
;\~'.
1.
y del Señor J esucnsto.
h
Ro.
1.
7.
i cp.
l.
9.
CAPÍTULO 2
P
ORQUE,
'hermanos, vosotros
mismos sabéis que nuestra en-
2 IDamos siempre gracias á Dios
i Ro. J. 8.9.
trada á vosotros no fué vana:
por todos vosotros, haciendo kme-
k
Wú.
5
/g'.
2 Pues aun habiendo padecido
moría de vosotros en nuestras
1 Hch. 16.
antes, y sido afrentados
1
en Fili–
oraciones;
22 ·
pos, como sabéis, tuvimos denuedo
3 Sin cesar acordándonos delante
m
H ch. 11.
en Dios nuestro "'para anunciaros
del Dios y Padre nuestro de nla
n
2
c;:
5 . 6 .
el evangelio de Dios con gran
obra de vuestra fe, y del trabajo
c1>.
3. 6
combate. '
de amor, y de ºla tolerancia de la
0
Ro. 2. 7.
3 Poi:que nuestra exhortación no
esperanza del PSeñor nuestro Jesu-
~~.:'.
1
/7~·
fué
de error, ni de •inmundicia,
ni
cnsto:
por'engaño;
4 Sabiendo, hermanos amados de
4 Sino segtln fuimos aprobados de
Dios, ' vuestra elección:
r CoI.
3. 2.
Dios
para que se nos encargase el
5 Por cuanto •nuestro evangelio •
~
Co. 2. 4.
evangelio
1
así hablamos; 'no como
no fué á vosotros en pala ra sola-
'
ª·
1.
~o.
los que agradan
á
los hombres,
mente, mas también en potencia,
sino á Dios, el cual prueba nues–
y en Espíritu Santo,
"y
en gran
u
c oi.
2. 2.
tros corazones.
plenitud; como vsabéis cuáles fui-
.~i: i:~ó.
5 Porque nunca fuimos lisonjeros
mos entre vosotros por amor de
en la palabra, como sabéis, ni to–
vosotros.
z2eo.
1.
2.
cados "'de avaricia; Dios es testigo;
6 Y vosotros fuisteis hechos irni-
6 Ni buscamos de los hombres
tadores de nosotros, y del Señor,
gloria, ni de vosotros, ni de otros,
~recibiendo
la palabra con mucha
u
Hch. 11.
aunque
•podíamos
seros carga
tribulación, ªcon gozo del Espíritu •
1rd~:
9. 4,
bcomo apóstoles de Cristo.
Santo:
6 ·
!
2 • l8.
7
Antes fuimos blandos entre vos-
7 En tal manera que habéis sido •
2
Jc°h.
3
ii.'
otros como la que cría, que regala
•ejemplo
á
todos los que han creído
b 5 1 2
<:;
0 .
9 .
1.
á sus hijos:
en dMacedonia y en Acaya.
eº"·
4. 10.
8 Tan amadores de vosotros, que
8 Porque de vosotros ha sido di-
d
if.cb.19 '
quisiéramos entregaros no sólo el
vulgada la palabra del Señor no sólo
. 2eo.12.15.
evangelio de Dios, mas aun •nues–
en Macedonia y en Acaya, mas aun
F il. 2 · 17 ·
tras propias almas; porque nos
' en todo lugar vuestra fe en Dios se
1 2
Ts.
1.
4.
erais carisimos.
ha extendido; de modo que no te-
9 Porque ya, hermanos, os acor–
nemos necesidad de hablar nada.
oHcb. 18 . 3 .
dáis de nuestro •trabajo y fatiga:
9· Porque ellos cuentan de nos-
h
2
Ts
2
3. 1 8.
que trabajando de noche y de día
otros hcuál entrada tuvimos á vos- ;
Ff¿h.
'15:
por no ser gravosos á ninguno de
otro~;
y 'cómo
?S
convertistei~
1
de
Ne:
0 •
12 . 2 .
vosotros, os predicamos el evan-
los.
ido~os
á Dios, para sel'Vll' al
k<t¡~b4.
1
:·
gelio de Dios.
.
.
.
kD1os vivo y verdadero,
1 5 .
·
·
10
Vosotros sois testigos, y Dios,
242