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ME XIC O
LAS ARTES POPULARES EN MEXICO
Méx ico es un país donde el arte popula r, eJe–
·cutado con uhá gran lealtad de espíritu por .el pue –
blo, asoma por todas partes. Manos prepa.ndas
para transformar Ja materia, educadas en una es–
pontánea mí stica del volumen , saben dar a la pie–
dra , a la madera , a la arcilla, al vidrio , al cuero y
los me ta les preciosos :el signo de su carácter
y
per–
sonalidad , devolviéndole a la materia lo que de ella
r ecibió el espíritu. El labriego, concluída su faena
en el campo, con un puñado de barro .entre los de–
dos, modela una vasija cuya forma algo tiene que
ver ccn su propio equilibrio vital. Improvisado
alfarero en un torno rústico hace girar
1'a
greda
morena, mientras va deleitándose en la creación for–
mal. Es que el diálogo entre el hombre
y
la tierra
no se suspende al dejar ·el arado junto al surco .
Continúa transformándose
y
superándose , penetran –
do su alma con el instinto de la realización plástica.
Lo mismo le ·Ocurre al minero
y
al obrero de cual –
quier condición, terminada su dura labor, labn
y
cince'la en su hogar, para su muje.r
y
sus hijo.s, p re–
ciosas figurillas con los más diversos mat eriales . .
Todo es te trabajo de noble artesanía lo realizan
los mexicanos a toda hora y en todas partes, gozo -
1:amente, naturalmente como un a parte esencic;il del
ritmo q ue dirige la vida nacional. Cantando en la
guitarra , tejiendo en el te lar, decorando
y
dibu –
jando ios símbolcs locales, ven ados , palomas o co-