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Por
eso
á
tí
ocurrimos
con
fé
viva
y
devoción,
para darte i3Ín reserva
alma, vida
y
corazón,¡
Como ciegos en
tinieblas
estrélla. de la mañ.ana,
te pedimos
luz
y
gracia.
' Reina
de Copac;abana.
Soi~
bella
puerta~ del
cieló
que al que toca no se cierra'
Abridme
pues madre mía
dadme
paz, no· me des guerra.
Si dadme
paz,
paz
di
vin9'
y
así
á
Dios conseguiremos
v al salir
de.
~ste
destierro
1)
'
1
con voz
á
la
gloria
iremos.
. Quis:.Jera ¡oh
María!
Ydulce Madre mía,
Traerte r.n este día
·
¡Ay!
en vez
de humilde
flor:
·un
himno
11an
ferviente
Que al
en tonarlo
hiciera.
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