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ESTUDIOS INDIGENAS.
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durar cerca de veinte afios. Dos ideas tuvieron que
<.lominar la mente de los castellanos, al encontrarse
solos, en aquel trance, en 1569 : una, la defensa pro–
pia, al verse asediados por naciones guerreras que se
ligaban para destruirlqs; otra, el deseo de continuar
la conquista, para lo cual necesitaban fundar nuevos
pueblos que le sirvieran de base. Establecida la guerra
sin tregua, sin descanso, desde 1567, el primer sitio
que llama la atencion de los castellanos, para estable–
cer un centro de poblacion es Ocumare, en los valles
de! Tuy: intentan fnndarlo ocho ailos despnes de le–
Yantada Caracas; pero la mayoria de los habitantes
de esta se opone, no queriendo dividir las fuerzas.
Y
aunque es cierto que para la fecha estaban ya redu–
cidos los Tarmas y Taramainas, los Mariches, los Te–
ques
y
.Arbacos, no podia contarse con la lealtad de
estas naciones, sobre todo, cuando los temidos Quiri–
quires, tenaces y terribles, habian empefiado todo su
odio contra el castellano. Al fin, despues de una lu–
cha Hostenida, los Quiriquires son
vencido~,
y la paz
general queda establecida en toda la peninsula, en
1583.
Los castellanos no tenian hasta ent6nces, sino la
naciente poblacion de Caracas,
y
el puerto de Cara–
balleda. que se babia reconstruido desde 1568 : todo el
r esto de la peninsula pertenecia
a
las numerosas tri–
bus indigenas, en un estado de aparente paz.
?ti
Que
hacer
°?
Era necesario,
a
toda costa, fundar un pueblo
entre los Quiriquires, reucorosos y traiclores, unica na–
cion que podria turbar la paz. Garci Gonzalo acepta
este pensamiento
y
funda la ciudad del Espiritu San–
t o ; pero los Quiriquires la destruyen. ( 4 ) Por se-
(4) El primer pueblo fundado por Garci Gonzalo d e Sil–
va, con el nombre d e
Espiritii Scinto,
fue en l a nacion de
l os Cumanagotos,
a
orillas del Unare, en l as tierras del