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GUJmRA

que llevaban de servicio no podían ya .sustentarse con las vi–

das,

é

muchos de ellos se quedaban por los caminos muertos,

é

como no 'toviesen fuerza para caminar lo's pobres indios de

servicio que llevaban,

é

juntos estoviesen algunos, a'llegaban

los dientes contra sus carnes

y

se comian á bocados 1os unos

á

los otros, coqio decimos;

é

como la hambre creciese, los

vivos comian ·á los muertos. Españoles hasta allí áun no se ba–

bia muerto ninguno, mas ya iban enflaquecidos que en los

piés no se podian sustentar. Diez

y

seis jornadas anduvieron

de aquesta suerte sin hallar en todas ellas nengun poblado;

se habian muerto de hambre más de tres mil personas de su

servicio,

é

muy gran dolor era de ver morir á tanta gen te,

y

entre ellos muchas hijas de señores principales del Cuzco

é

muchas pallas. Pues habiendo andado Jos españoles diez y

seis jornadas, allegaron á un pueblo adonde hallaron algun

bastimento, pero era tan poco que la hambre por ello no

fué

parte que cesase. Peranzures mandó á algunos españoles que

procurasen de tomar indios que los guiasen por qu·é camino

podrían con más brevedad salir de los montes,

é

tomando al–

gunos supieron de ellos que volviendo sobre la· mano siniestra

é caminando á la parte del Poniente irian á salir á la provin–

cia del Collao, é que por nenguna otra parte podian salir tan

breve ni tan bien como por allí. Oído por el capitan Peran–

zures é por los

~spañoles,

les pareció ser cosa de q·ue les

vernia gran provecho de salir presto de aquella tierra donde

estaban metidos, pues si mucho en ella se tardaban no .se es–

peraba sino muerte triste de todos. Luégo

acord~ron

de se

partir, encomendándose á Dios nuestro Señor, suplicándole

les quisiese ayudar,

é

favorecer, é sacar de tan infernal tierra

como estaban , é así prosiguieron su camino sin llevar nen–

guna cosa que de comer fuese. Los indios habíanles dicho que

ad elante hallarían un templo adonde el demonio era por ellos

adorado é que hallarían alguna comida junto

á

él, mas no

pudieron por nenguna manera pasar adelante;

é

fué tanta el

agua que caia que parecia que otro diluvio quería venir, .Y en

poco estuvo que todos pereciesen en aquel camino.