345 / 484
DE- l,AS -SALINAS;
333
dado
qu~ t~~ía
en "mirar por su persona' p·orque como mu-.
cbos de los que con él se hallaron en la.s Satinas viniesen no
cnn otro · propósito que robar lo que pudiesen,
y
con espe–
ranzas de quE'. les darían rep&rtimientos de indios,
é
viendo
que nenguna cosa les quería dar, ántes por los· entretener
de~ia
que el Gobernador, su hermano, vernia con brevedad,
é
poblaría las Charcas
é
Arequipa; de los tales dichos hacían
búda, no
te~iendo
en
qad~
la tierra más. riquísima
é
aventa-·
Jada que en -todas :Jas Indias hasta agora hay, porque, aunque
en muchás partes ·dellas se saque crecido número de plata
é
oro, no se iguala con lo de acá. Diego de Urbina, Diego de
Rojas, Felipe Gutierrez
é
otros, estaban muy mal con lasco–
sas de Hernando Pizarro,
é
les pesaba por haber venido .en
~u.
f(lvor
é
contra el Adelantado.
Era vecino en esta· ciudad del Cuzco un Pedro de Candía,
riquísimo, porque tenía en dineros cien mil duoados,
é,
pa,ra
los
g~star
é
quedarse sin nada, no
fué
menester más ocasion
de _hacé_rle entender' una india .de su Servicio, con quien era,
~
.fania
tei)Ja conversacíon, qhe pasada la cordillera de los An·
des. da ria eh-
u~a
tierra .muy poblada-, riquísima
é
proveida
de. ·muc4os mantenimienro's
é
ganados,
é
de
lé~s
otras C-osas
qúe. par.a sustentar la humaoa vida 'son necesarias ;
é
como
_
Ped~ó
de .Candía t'l,lVÓ.
aq~ella
noticia, creyendo ciertamente
que era. ciert<?. lo
qu~ .
la .india le. deci \l , no se
ac01
1
dan~o
que en . descubrimientós nunca ·'dicen verdad ni dejan de
m~ntir,
é son sus dichos parte para que se pierdan muchos
capitanes~
gente, como ·se han perdido en estas partes,·ba.–
liló
.á
Hernando Pizarro ,para ·qúe _le quisiese ·dar la con'quista
de la tie'rra, que, ségun decía, se llamaba·Ambaya
y
nom–
brarlo por capitan, pues
á
él·no le faltaba aparejo ·de moneda
para gastar con los soldados que con
éf
quisiesen ir, é se
hbraria de algunas _importunidades que ·1e daban. Hernando
~izarro,
corr:¡ó otra ·cosa no desease que ver
fu~ra
de la ciu–
dad·del Cuzco tantos españoles como en ella estaban, porque
babia rr1ás de mil
é
s.eiscientos, le respondió que era contento;
-é
por virtud 'del poder que del Gobernador, su hermano, te-