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DE LAS SALINAS.
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CAPÍTULO XLI.
Cómo el provincial fray Francisco de Bobadilla dió sentencia
entre los Gobernadores sobre los limites de sus gobernaciones,
é
lo que se contiene en la sentencia,
á
la letra ,
sacado del original.
El Gobernador D. Francisco Pizarro cerca estaba del
asiento de Mala,
é
todas las cosas que pasaban dello tenía
aviso, y siempre escribia al juez árbitro para que se diese
p1:iesa
é
sentenciase aquel negocio, pues ya babia visto las
provisiones de Almagro
é
las·suyas, é sabía en qué grado es–
taba de la altura el rio de Santiago
é
la ciudad del Cuzco,
y
tenía,
y
todos sus capitanes, que sería en su favor la senten–
cia; y el Provincial no pudo negar, segun
~engo
sabido, que
dejase _de ser más aficionado á las cosas del Gobernador que
no
á
las del Adelantado. Y el mismo Adelantado tambien le
escribía que mirase con gran cuidado lo que tenía entre ma–
nos, pues era negocio tan calificado que retjueria gran con–
sejo
é
saber; é pues era claro que la ciudad del Cuzco caia
en los términos de su gobernacion, que no dejase de hacer
justicia:
y
él respondia
~
todos graciosamente,
é
que deseaba
hacerla. Solamente Orgoñez no mostraba tener nengun con–
tento de la sentencia que el Provincial babia de dar,
é
decia
al Adelantado que le parecía que le habían de engañar
é
quedarse con toda la tierra,
é,
por la poder gozar sin mu–
danza, quitarle Ja vida;. Diego de
Alva~ado
tambien decía
que fuera ·mejor no haberse fiado de sólo un fraire, sino de