482
¡¡:ar contra e l tira no, y qu e si tampoco no hallasse
alli lo que pretendia haz er se y ria a España en e l
n auio qu e auia de comprar, s in temor de los man–
datos de Gonc;alo Pi<;:a rro . l)..llende de todo esto,
que como el era mancebo y de poca hedad no te–
nia ning un esperiencia de en todas las cosas para
lo haze r, y que no auia hombre en toda la tierra
quien mejor lo hiziesse que era Juan Velasquez
Vela
uñez, a quien tenia n gran amor y r especto .
Y que como hombr e de buen consejo y de madura
heda d terní a g r a n esperiencia en todas las cosas,
y
que siendo el la cabe<;a le sig uirian todos los
seruídores del r ey,
y
que entonces podría vengar
la muerte del Virrey su hermano. El Prior le a la–
bo mucho el gran desseo que tenia de yrse a Es–
paña, mas empero le amonesto y persuadio quan–
to pudo qu e no matasse al. tirano, porque no sal–
dria con s u vana pretension, porque podria ser que
pelígrasse e n la demanda, que l ueg·o ser ia se ntido.
Y
que tomasse por m ejor partido yrse a España
lleuando consigo a Vela Nuñez, qu e con ello obli–
garia mucho a sns deudos y parient es porque no
le fuessen contra rios all a, mas aun le ayudarían y
S u Magestad se tendria del por bien seruido
y
le
baria grandes mercedt::s. Estas platicas con otras
passaron entre e llos, y al fin fin se vino a concertar
todo lo platicado y el frayle propuso de hablar con
buen zelo a Vela Nuñez sobr e la yda tan solamen–
te a España, que [en] lo dernas platicado no le quiso
dezir cosa, y a llí se concerto las señas que a ui an
d e tener los muñidos. Fue la seña l que todos los
que se quisiessen yr a España fuessen a Juan de la