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modo que si no
hubiese
salido
de
su
pro–
pia Provincia ; pues de este modo estará
honrado el exercicio de las 1\lisiones con
varones de 1nucha autoridad ,
y
expe–
riencia'· sin que por ·su falta,
ó
separacion
se siga ningun detrimento á la Orden.
z6
Y porque quando por las presen–
tes atendemos al decoro de la primera
Orden de N. P. S. Francisco ,
y
al con–
suelo ,
y
á
.las necesidades espirituales
de la segunda , no debemos ol vldarnos
de la Tercera Orden de Penitencia
1nuy
amada del n1ismo Santo Fundador; para
que se aumente mas cada día la enun–
ciada Venerable Orden de Penitencia ins–
tituida por N. P. S. Francisco para perso–
nas de atnbos sexos , que vi ven en el si..
glo ,
y
di vid ida por Clemente VII.
y
Paulo
111.
en tres estados baxo de una
misma denominacion de Orden Tercera,
y
con la cornunicacion de los rnistnos
privilegios , gracias , concesiones , indul–
gencias,
y
favores,
y
solo baxo de di...
versos estatutos , segun la exigencia de
cada estado ,
y
los Santos de ella , que
como refiere el mismo Paulo
III.
en su
dz
Exhortacion
para la exten–
sion
de
la
T ercera
Or~
den.