PROLOGO~
Un famoso ft·aile del siglo
XVI,
llamado
Martín Lutero, p.retendio reformar la Iglesia
catolica; el mundo de los corrompidos, de los
racionalistas
y
de los incredulos aplaudió la
idea;
y
la voz de reforma resano de una a
otL·a extremidad de Europa.
La refót':lla fue digna en todo del Pro–
tagonista que la proclamo: violento, m·reba–
tad·o, orgulloso, neg'o la Iglesia visible
y
su
cabeza
y
pospuso la autoridad de esta
a
la
propia razon; invadido por el esp1t'itu de la
lujuria elevo la inmoralidad
á
principio dog–
matico; violador de los votos religiosos
y
apostata se ensaño contra las Órdenes rno–
nasticas
y
los consejos evangélicos. Breve; lá
reforma d'ebia consistir en hacer
tCtbula
1·asa
de las verdades fundamentales del Catolicis–
mo, de
la
Iglesia
y
de sus instituciones mas
titiles; debía refor.marse.....¡la d@struccion!.•.•