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CoNFERENCIAS DE
CERO
NA)
fe les fl1pone en materias efpirituales,
y
del Af–
ma '
reg~darmente
fedn mas
a
propofito para la
buena afsifl:encia de -los Moribundos. Fuera de
que,
G
qu ieren confefarfe , como fu cede muy
amenudo , aungüe en aquel efbdo puedan
ha~
ce
rlo con qu alefguiera Simples Sacerdotes ; fin_
embargo parece que no fed con tamo acierto
y
fatisfaccion de entrambos, como
G
los oven los
que fon Confefores, por la gran praética que tie–
nen del ConfeGonario. De aqui fe
ve
quan ju(–
tamente
el
mifi110 Señor UrGno comino la pena
de la privacion de fllS licencias
a
los Confefores,
que en tal cafo rehufa.ífen afsiítir
a
los Moribun-
Supra num.7.
dos,
qua
renuentu ,privabimus Jinefpe ulterius im-.
.
petrnndi.
9
Por efto los Parrochas,
su
e en ft1s Parro.–
chias tengan Conventos de Religiofos, que zelo–
famente
{e
dediquen
a
efte .Gn
to -
exercicio de
ayudar
a
bien morir' defpues de dar muchas gra-.
cias
a
Dios Nueítro Señor, deben fer mny agra–
decidos al buen zelo de los Padres, y correr
muy
bien con ellos; pues trabajan en lo que tanto es
del agrado de fu Divina Mageítad, y bien de
la~
Almas de fu cargo; con que le ayudan
a
cumplir
. _ .
efta gravifsima obligaci0n de
fl1
Oficio. Tengan
,P~[eVIno .
de
prefente lo que que les advierte un Parrocho tan
Offic¡o
Cwr~tz
e.
experimentado como PoíH:vino:
Et
Curatz.u, qui
7·
d:
~a:,'ZZ te~t .
verefaciet' benevotentia profequetur Regulare¡
Mt~-
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napertt, egentes
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ua aroc
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:
y e1pues :
1
an-
tum abefl,
ut
jimultat~m
exerceat
:
pojflmt enim
multum jibi,
(.7'
fuú
in utroque homine prodejfe
&
(jbejfe.
Afsimifmo en las Parrochias, donde ha–
ya
algunos Beneficiados Confefores , gue ch_ari-
tatl-