;A.
s s-v n
T
o-
XXII.
27!·
0:-€1Tcins: No pocos de eítos c;;¡fos han fi.Kedido
~n
los tiempos pafados y en los ·prefemes, con
efectos bien laílimofos ;
y
fl1pongo feria en Mel'"
dicos Jovenes' inexpertos '
y
menos
confidera~
d0s : que ya fe ve. , gue no fon capaces de
in~·
currir en efta
fa1
ta tan in{ignes Medicos, como ·
hay en todas partes, mu
y
timoratos , de mucho
zelo,
y
juicio.
~
8 De los Medicos poco con{iderados,
y
no
·de otros, habla fin duda el Sabio
y
devoto Padre
, •
Echeverz del Real Orden de Nuefl:ra Señora de·
la Merced , celebre MiGonero de nne"ílros
~rieffi,..
pos, qLlando nos pinta tan al vivo lo qué ha fuce-
. dido muchas veces fobre eíl.-e punto :
~e
penfoys
P. Echeverz
(dice)
_que focede en .ta enfermedad de muchos,
y
ef
'Pl~ticas
'Doc•
pecia!mente de los Poderofls
.?
En· un verJoto dice todo trmales
tom.
4·
David.
Multiplicat.:e flmt infirmi tates eorum, po-
plat .z
•
§.3
•
fot.
íl:ea acceleraverunt:
y
añade Rugo
ire ad
Deum ~
21 '
M ultipticaronfl /o¡ accidcntCJ de la enfermedad
,
y
dejpues t odo fue aceleradamente para ir
a
buflar
a
DioJ. Admirable dicho
!
Pero pcwa entmcjerlo
,
es
menefler explicarlo como regulcwmentc focede .
En-
firma un Hombre de claft, Rico
o
N oble,
o
alguna
Señora principal
:
tlega
a
vijitarle el Medico una
J.
otra vez
,
y
nu
dcfonima ni al Enfermo, ni
a
los de
fu Gafa. Profigue la enfirmedad, multipticaronfl tos
accidente¡; pero ni aun entonces pone en cuidado el
·Medico
a
·nadie, porque
Ji
le preguntan: como lo pafa
Don N.? Suele rifponder: Malito ejl/i , ·pero no
t!.UJ'
·de cuidado. Proji.guen la; 'uiJitaJ, multiplicanfi /o¡
crecimientos de la .fobrr:;
el
pulfl, la orina,
y
la len–
g ua t odo indica ya peligro: advierte/o et Mec/ico;
p
ero no lomanifiefla
:
to ,mal que
,dice:
Traba_i.jih
Tom.II.S
efla