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más profunda en materia de religión, por cuanto reconoce el
esph·itu
púvado
como único principio de interpretación de la palabra divina;
2.
0
Que de él derivan como lógica consecuencia el racionalismo y la
libertad del pensamiento con todo su cortejo de errores
y
extravíos;
pues suprime el magisterio autoritativo de la Iglesia y desenfrena
á
la
razón individual;
3.
0
Que es, por consiguiente, una herejía, ó mejor dicho un cúmulo
de herejías condenadas por la Igle ia; y por lo tanto se halia tamuién
en abierta oposición con el artículo 4.
0
de JJuestra üonstitucion política;
4.
0
Que la doctrina fundamental
p~otestante
es de suyo perniciosa y
disociadora por el principio que profesa de que pam sall'arse basta
ht
fe sin las obras;
5.
0
Que,
á
pesar de todo esto, se hacen descarados esfuerzos para
implantarlo entre nosotros, repartiendo biblias prohibidas, y libros, fo·
lletos y periódicos iuficionados de sus errores para seducir al pueblo;
6.
0
Que se anuncian y fomentan reuniones públicas en que sn de·
tiende la doctrina protestante, y se ejercen actos de su culto con escán·
dalo de los católicos;
Acuerda:
1.
0
Adherirse al Episcopado Peruano en su enérgica protesta contra
esa propaganda impla;
\!.
0
Dar con el mismo la voz de alerta
á
todos los católicos para que,
no se dejen engañar por ese espíritu de novedades;
3° Pedir al Supremo Gobierno que por todos los medios legales, im·
pida los enunciados abusos.
CARÁCTER DE LA FAMILIA CRISTIANA\' EL
MATRIMONIO CIVIL.
El Congreso Católico del Perú
Considerando:
1.
0
Que la familia, llamada por Cicerón
pn'ncipurn m·bis et semi1Ja·
''Útm
c•·oipublicae,
ontológica y cronológicamente es anterior
á
la Socie·
dad y al Estado;
2.
0
Que la familia supone á su vez la existencia del Matrimonio, que
es su fundamentó;
3.
0
Que por consiguiente la familia y el matrimonio reconocen por
su fundador y primer legislador no á la Sociedad, sino al mismo Dios;
4.
0
Que en efecto la Revelación nos enseña_que Dios mismo instJtu·
yó y bendijo la primera unión,
é
hizo proclamar por el mismo Adán
la ley fundamental de su unidad y perpetuidad;
5.
0
Que habiendo Dios, según enseña la Doctrina Católiéa, ele1•ado
á la humanidad desde el principio al estado sobrenatural, santificó tam–
bién el medio legitimo de su propagación y qne por lo tanto puede cou
razón sostenerse con el Gran Pont1fice León XllJ, que el matrimonio
fué siempre
por
.sí
santo .sua v!, su<t naltu·a, sua sp01de sacrum.
6.
0
Qne es dogma de fe que
. Jesucristo elevó el mismo contra·
to matrimonial
á
la dignidad de sacramento; de donde resulta que en·
tre cristianos, ya no son separables el contrato
y
el sacramento;