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no encontrando. en muchos de Jo ca. os, un centro que,
reemplazando en Jo posible á la familia, les
pre~te
la
comodidades materiales
y
les dé las garantías de morali–
dad de que tanto han mene ter.
El Congreso Católico debe tender á remediar ese mal;
y
tal es
el
objeto del quinto
y
último proyecto que por
orden de
la
Sección tercera someto á vue tra ilustrada
deliberación.
La Europa, que se preocupa deveras por todo lo que
tiende á la civilización
y
al progre o, tiene establecidas
ya ca as de pensión ó pupilajes con po itivas ventajas
morales y materiales para los estudiantes; y no. otros no
debemos sustraernos á necesidad tan urgente. Por eso
debemos h'lcer votos por que se establezca en Lima di–
chas casas;
y
al efecto, encomendar
á
la "U nión Católi–
ca" el nombramiento de una Comisión, que se encargue
de su establecimiento y reglamentación.
eíiores Representantes:
Tal es el trabajo que, por ahora, os ofrece la
ecc10n
tercera en cuyo nombre me ha cabido el alto honor de
hablaros. Que él merezca vuestra aprobación y que los
acuerdos que os propone sean de proficuos resultados
para nuestra Patria, será el mayor galardón á que poda–
mos aspirar.
Mientras tanto, mi Sección queda haciendo fervientes
votos por que el Dios de las Naciones siga proporcio–
nándonos días erenos, bajo la sombra de gobiernos tan
ilustrados
y
bien intenciOnados como el que actualmen–
te tenemos,
á
fin de que unidos los católicos trabajemos
de consuno por la salud de la Patria.