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150

EXERCICIOS

III.

DoM.

nientos impida el

que se

sientan los sinsabores

y

la amargura del corazon ; y ved aqui por qué no

háy gozo alguno en el "1undo , que no sea estre- _

pifoso , bullicioso

é

inquieto·;

y

singuno

que sea

puro ,

y

verdadero gozo.

·

PUNT"<~

SEGUNDO•

e

.

'

.

.

'

C

onsidera ,

que

no hay ni puede haber verda..

dero gozo sino en el corazon de las personas

virtuosas ; el verdadero gozo es

froto

de la buena

-~?nciencia

; ·un gozó puro , lleno. , sólido ,

y

que

dexa al alma satisfecha; no puede nacer en otre

terreno que en éste. Una persona verdaderamente

christiana ; un corazon puro

t

un hombre de bien,

que pone toda su ambiciQn en agradar

á

Dios ,

y

su

gloria €n

cumplir

con

sus

obligaciones ,

y

que

ocupado todo en ei negocio de su salvacion , no

piensa sino en adelantarse en la ciencia de los

San"!!

tos ; siente un gozo muy diferente de aquel gozo

de

embriaguéz y

de

pasion ,

de

aquel gozo

afe...

minado

y

liviano,

!:"

~ªUt;

están embebecidos· los

.,,,

..

sentidos de los mundanos. El gozo que siente esta:

persona , es un gozo de razon

~

siempre puro,

siempr.e igual, que a(rebata el alma

sin

turbarla;

es un ·gozo de una region enteramente espiritual ;

y

por consiguiente conforme

á'

la naturaleza

del

al~

ma ,

y

solo capáz de satisfacerla , de contentarla

y

d~

saciarla.

Libres entonces de la

tiranía

de las

pasiones por rla viél:oria que se ha conseguido de

estos

enemigos de nuestro

reposo ; penetrados

de

aquellas grasdes

ve:::dades de la

fe ,

que hacen tan

f

i ..