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EXErJ(CICIOS
Enero.
recemos luna noforros mifmos , no.podemos fer difci·
pu los de Chriílo.
Q!.é
nos parece de el1o? Segun eíl:a
idé:i tendrá Chriíl:o
el'
dia de
hoy
muchos difcipulos
en
el
mundo?
Q!.é
cofa m:ts lo:tble, ni mas juíla, que amar al pro..
ximo? El mifo10 Dios nos lo manda con precepto for–
mal
y
exprefo. Con codo efo, quando fe atraviefan
los inrerefes de Dios, es meneíl:er renunciar la carne,
b
fangre, y :tuna sí mifmo, fo pena de renunciar
a
Dios.
El que viniere
a
mí (eíl:a expreGon compre hende todos
los efl:ados , rodas las condiciones de las perfonas Chri[–
tianas) el que viniere
a
mí, dice Chriíl:o ,
y
no aborre–
ciere al padre,
a
la m.adre,
y
halh
fü
mifma pcrfona' no
puede fer mi difcipulo. No puede fer cofa mas pofüi–
va, ni mas clara. No necefaa de explicacion el orácu–
lo. Pero efie moral es muy de nuefiro guíl:o? Se prac·
tíca mucho el día de hoy eíl:a chriíl:iana philofophía?
Ceden fiempre
a
las obligaciones de la Religion los
interefes de la familia
?
No fe dá oídos jamás
a
los cla·
mores de la carne y de la fangre en perjuicio de la con–
ciencia? En los negocios, en las di verGones , en
los
pro–
yeél:os para adelantarfe, para hacer fortuna, fe confül–
ra fiempre
a
folo Dios ,
ya
folo Dios fe le oye, fin que
cDncurran orros refpetos ? Ciertamente nos merece ·
Dios bien poco ;fino nos merece todo nuefiro corazon.
Q!_é
impiedad
!
Colocar al idolo de Dagon en
el
mif–
mo T emplo. ·O mi Dios
!
Y qué mal fe compone lo
que obrarno·s con lo que creemos
!
Creemos vueíl:ras
palabras; pero nada menos hacemos que lo que ellas..
nos intiman. Nueíl:ras obras defmienten vifiblemente
nueíl:ra
Fé.
- No
permitais,
Señor,
que efta
confeíion íirva folo
para.