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os
Enero.
Sus penitencias correfpondian
a
fu
devocion. Afe-·
guóba él mifmo que le fervian de verdadero rormen-.
ro
los alivios que era precifo conceder
a
la necefidad
de·la naturaleza. Tantas ,
y
tan eminentes virtudes lle..
naron de envidia,
y
de inquierud al Infierno. Pufo en.
movimiento el demonio quanras máquinas, quanros
artificios pudo difcurrir para tentarle: pero en los exer–
cicios de penitencia, de oracion ,
y
de humildad halló
nueíl:ro Santo todas las armas que ha
v~a ~eneíl:er
para
rebatir todos füs esfuerzos. Sobre todo la devocion
a
la
Samifsima Virgen fue el ·principal efcudo que le firvió
para defenderfe. Decia que defpues de Jefu-Chrifio
te–
nia colocada toda fu confianza en la
W~re
de miferi–
cordia;
y
los auxilios que eíla Señora
rt
conGguió por
toda la vida, le hicieron falir fiempfe viétoriofo del
Infierno junto.
?.. ·
La foledad era toda
fü
delicia;
p.
(e atendib me-
nos
a
fu
inclinacion, que al gran
C©{tfbpto
que fe havia
formado de
fu
prudencia,
y
de
fü
piedad. Hicieronle
Abad de Fuente-Juan,
y
defpues de Clulis, donde fer–
via de confüelo
a
la violencia que
le
havian hecho, pre–
cifandole
a
a~eptar
aquel cargo ' el horrible defierro
conde ell:aba colocado el Monaíl:erio ,
y
la efperanza
·tie acabar fus dias en aquella foledad : pero Dios lo
havia difpuefro de otra manéra para
fü
mayor gloria.
Defpues que por efpacio de quince años fue modélo
de Abades fantos, quifo
el
Señor que tambien
fu
efe
modélo de Cantos Obifpos.
·
'
Governaba Guillermo füs Monges con tanta dulzu·
&a
y
con tanta prudeneia, que fe hizo dueño de los co–
yazones de todos. Vivía con fus fobditos como
fi
fuera
el
menor de
todos~
con una humildad profunda,
con
un~
~
·
pure·