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de Moyses , devorara los Dragones de
ésto·s
sabios de Egypto (
1);
y el Buey múdo
harii
eJlll)Úde'éeI'r
a
tantos ,sabios Ígoorarues ,
perG
c;harlatánes , comor
.adóra
nuestro .siglo.1
Comra vosotros , ·Libertinos, s.e dirige ..este
discurso, alucínados Penegíristas ·de estos nue•
vos Filoso.±:os , qu,e
S{t
han l<tfvantadG> en ·nue&!
tro .siglo ; con v.osotros
1
halDlo
·~
,que aborré1
cierido la luz de la mas sana
y
christiana Mo–
rnl, seguis las tiniéblas de unas doctrinas
y
maximas opuestas
1
alr Evangelio , nodvas
a
vuestras almas
y
contrarias ·al bien del Esta–
do , como lo decláma en su Instrúccion Pas–
toral aquel Zelosisimo Arzo.bispo de Santiago
Bocanégra. Seguid
y
abrazad , os diré , la
Doctrina de Tomas , que ella es , despues
de la Sagrada Escritura, la mas cíérta regla
para jamas apartaros del camino de la ver–
dad (
i ).
Si todos , decia · el Eminn:º
y
Sapn:1º
Ca¡denal Casanáte , siguieran la Doctrina de
Tomas , no hubjera en el m'undo heregías , la"\
xitudes en la Theología moral , ni tampoco
ilúsiQnes en la mistiea (3). '
1 · ·
'
f;
·,•,
y
( 1)
Exod. c.
7.
v.
12.
(2) 1·
Inoc: VI. apud Piccin. de aprob. doct.
D.
Thom.
t.
2 .
parr.
2 9 .
et Pins
V.
,
(3)
Bris in vit.
D.
Thom.