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DE CHRISTO.

CAP.

-LI.

'r

;97

9

Y tan1bien creeria, que como muy acomodado,

re1nifo~

y

flo jo Juez, fentia como agenas las penas del Inocente,

y

le pa–

recio

á

Pilatos , que ni tantas crueldades era baíl:ante

á

acaba(

con aquel Reo, por fer muy ordinario en los relajados,

y

acomo~

dados,

á

quien anúna en todo fu propio amor, no tener

po~

n1a–

les los otros , fino los propios :

y

que no fufre un rafguño en fu

perfona,

y

llenos de heridas,

é

injurias ·,

y

llagas los demás, lo

mira,

y

oye,

y

co1no penas agenas, todas le parecen pocas.

Ha~

biendole, pues , concedido Pilatos al Venerable Jofeph

el

Cuer–

po del Redentor , fin recelo alguno fue al Calvario ,

y

con Ni.:

codemus ,

y

San Juan Evangdiíl:a le bajaron de la Cruz,

y

en–

trcg6

á

la Re

1

na de los Angeles fu Madre ,

y

con piifsitnas lagri..

mas lo recibi6 ,

y

lo llor6. Siendo amable Miíl:erio para

el

Chrif–

tiano , ver

á

1a

Virgen Maria con Chriíl:o nueftro Señor al

nacer~

ver a

t ..

mbien al morir; como quien feñala

~

no folo que

naci6~

y

muri6 por nofctros

el

Hijo Eterno de Dios, fino que para lo"":.

grar fu vida,

y

fu muerte no

hay

medio co o

fu

Madre. Pudie..

ra caufarnos recelo la Mageíl:ad,

1

oonocer que es

Dios,

aunque

Hombre, fino nos a enuara la intercefion d

a Madre de

aquel

,que es Hon1bre , aunq e Dios.

1

o

Y aunq,µ

la Virgen antifsima Cabía , que iba envl.lelta

la Redencion del genero humano en la muerte de fu Hijo,

y

que

· era decreto dd Padre Eterno , y lleno de bienes inumerables¡

todavía efie conoci1niento, no minoraba

el

dolor, ni

el

llaneo,

\,-erle 1nuerto en fi.1s brazos , viendo con no ponderable pena al

Hijo de Dios ofendido de fus miftnas criaturas ,

y

que le fabri:.

caron la n1uerte al que les babia dado la vida. Miraria aquellos

ojos , que dieron luz

á

los Cielos , eclipfados : aquellas manos,

que formaron lo criado ,

taladr~das

: aquel Cuerpo Gloria de

los Serafines, envuelto en fu n1ifma Sangre. Y que duda hay que

la M¡gdalena Horaria cambien con lagrimas a1norofas

á

fu Dios,

y

Señor n1uerto:

y

la que lav6 fus pies con las fuentes de fus ojos-,

y

limpi6

el

polvo con fi.1s cabellos, mejor lavada con ellas,

y

lim-

piaria con ellos fus Llagas,

y

Noble Sangre.

·

1 1

Siendo ,

en

n1i entender , motivo de gran dolor en eíl:ai

Santifsitna pecado'ta:,

el

ver que las

ulti1n~s

, .

y

mayores perfecu–

ciones del Señor , fueron ,

y

falieron de

ft1

cafa. Porque la Re–

fu rreccion de Lazaro fu hern1ano , hizo mas ardiente la envidia

del Fariséo ,

y

fus finezas al ungir

el

Cuerpo del Señor , no folo

,

de~