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Buenos Aires, Agosto 7 /892
S D Ricardo Palma
Estimado señor,
He leído con
el
interés de siempre, un trabajo suyo titulado Una frase del general
San
Martín,
y como conozco el asunto
y
lo he oido contar por el general Olazabal,
en vida del general Escalada, que era mi tío, me permito indicarle alguno
datos, por si usted quier arreglarlo, cuando lo agregue
á
sus libros.
El cuñado de San Martín era el general Escalada -entonces sargento
mayor- oficial distinguido y apreciado, que nunca faltó a su deber
ni
esquivó
el peligro.
Cuéntase de él, qu como en el itio de Talcahuano su escuadrón no
se movíera se [ilegible] c ntra La Heras, diciéndole que no lo [esponía} por
el vínculo que lo
unía
a San Martín.
E calada lo supo y pidió autorización
á
aquel jefe para hacer una
barbaridad.
Hizo formar el e cuadrón (Granaderos a Caballo) mandó hechar
able al hombro y avanzó pa o
á
paso, (él a la cabeza) sobre la murallas
que vomitaban fuego. Llegó hasta el pie de ellas
y
regresó
al
mismo paso,
siendo recibido en medio del aplauso del ejército.
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