CAPITULO IV. LA REPROGRAFIA
Uno de los objetivos de la preservación es de mantener registrada la información mediante
la transferencia del documento de su soporte original a otro soporte y así cumplir con preservar
la forma física del original, evitando su manipulación constante. Para ello nos valemos de las
modernas técnicas de reprografía, que son: La fotografía, la micrografía y el fotocopiado.
l. LA FOTOGRAFIA
A partir del año 1920 empieza a incrementarse la fotografía en las bibliotecas, la que
toma fuerza con el desarrollo de la cinematografía debido a que se inventan elementos más
permanentes para su elaboración, así como equipos cada vez más sofisticados; y es así como
aparecen las películas de nitrato, las que resultan ser muy peligrosas por su misma composición
química, que reaccionan con el paso del tiempo y pueden provocar incendio. Luego aparece la
placa de diacetato, con la desventaja de que la emulsión se desprende y el soporte se deforma;
después aparecen las películas de triacetato y polietileno.
La
conservación ideal del negativo está entre l 4ºa 17° centígrados ó 60º F., con una
humedad relativa de 20% a 30%.
La
luz natural y la luz artificial le causan daño físico-químico, debido a los rayos infrarrojos,
por lo que se recomienda el uso de los focos pavonados.
Su almacenaje requiere de elementos especiales, como cajas de pulpa de algodón o de
lino, estuches, sobres y principalmente álbumes de ácido, para evitar, entre otros, su infestación
con hongos; ya que de suceder eso, se requiere de una vaporización con Timol y luego un lavado
neutralizante.
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tipos de cámaras fotográficas que utilizan desde placas de
vidrio hasta modernos productos químicos para sus negativos
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