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nstrumentos de
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ran
T
ransformación
recordar que el país cuenta con una forma de financiamiento que
hace no obligatorio la demanda de capitales extranjeros para reali-
zar un proyecto de inversión a ser ejecutado por las empresas-país.
Con ello queda establecido que si existe necesidad de levantar una
empresa cualquiera, existen los recursos necesarios y suficientes.
Segundo. La experiencia nos enseña que las nacionalizaciones no
han sido, nunca, un buen negocio para el país que efectuó la nacio-
nalización. En todos los casos, en el proceso de nacionalización,
las empresas privadas han utilizado toda suerte de argumentos para
que, de un lado, el monto de la nacionalización sea exorbitante
con relación a su real precio y, de otro lado, la cosa nacionalizada
nunca haya tenido el resultado esperado. Por lo general, las nacio-
nalizaciones han terminado en un desastre nacional.
Por ello, es mucho más conveniente, en una economía de mercado,
hacer jugar todos los elementos de la economía mercado para que,
si la empresa privada no acepta ceder la producción del bien eco-
nómico o devolver la explotación del recurso natural, ella quiebre
simplemente.
Un ejemplo bastará para mostrar todas las posibilidades que tiene
un país, en economía de mercado, para hacer valer sus derechos y
su soberanía nacional.
En el caso de las empresas multinacionales mineras, por ejemplo,
que es el rubro fuerte en los países del Tercer y Cuarto Mundo. Ellas
crean empresas-enclave por tres razones básicas. Primero, porque
la mano de obra es increíblemente barata. Segundo. El monto por
el concepto de Renta que exige el gobierno es increíblemente bajo.
Tercero. Porque los países en donde las empresas multinacionales
deciden realizar su explotación minera, los gobiernos nacionales,
como en el caso del Perú, son corruptos por tradición.
Entonces, si partimos del supuesto de que se encuentra en el Po-
der un gobierno con real intención de hacer respetar las decisiones