DE SAN AGUSTIN.
2
9
I
con instancia,
y
vehemencia ,
y
se–
paró de allí otros qualesquiera bienes,
diciendo :
quánto mas vuestro
'Padre
celestial dará buen espíritu
á
los que
se
lo
piden~
Este es aquel espíritu
por el qual (
1)
se difunde la cari- ·
dad en nuestros corazones , para que
amando
á
Dios ,
y
al próximo, cum–
plamos sus mandamientos.
Este
es
aquel espíritu (
2)
en el qual clama–
mos Abba, Padre;
y
por lo mismo
él nos hace pedir el que deseamos
recibir ,
él
nos hace buscar al que
deseamos hallar, él nos hace llamar
al
que
procuramos
llegarnos. Que
esto sea así lo declara el Apostal,
que
habiendo dicho que nosotros cla..
(1)
Rom.
)• ;.
(2)
Rom.
8.
I )•
Tij