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IV E
RA
.l.
'ni
la
Hidraulica,
io
mas de lo que ensena ·acerca de ·1a
'Ci–
vil se reduce al ornato , sin detenerse en ninguno de los
dos raf.1os fundamentales de la d1stribucion
y
edificacion.
Verdad es que trata de la Arquitectura Militar , de la Ar–
tiilerfa , de la Navegacion , tratados que
n~s
pareci6 opor•
tUnO
excluir de nuestrO plan , por fines que
a
SU
tiempo
manifestaremos. Como quiera , dos circunstandas suma–
mente apreciables concurren en la obra de Tosca ; es
a
sa–
ber , mucha claridad (
y
tambien es suma la de Dechales )',
y
una disposicion general de los tratados, igualmente que
una coordinacion particular de cada uno de ellos muy bien
entendida ; de modo que no dudamos afirmar que si
se
le hubiese hecho en estos tiempos al
·P.
Tosca el mismq
encargo que
a
nosotros , tendria Espana muchos motivos
d~
celebrar tan bien fundada preferencia ., asf como no hu–
biera salido acaso tan precioso de nuestras manos como
de las suyas el extracto del Mundo Matematico de De.:..
chales.
Si'guese el Curso de Wolff,
6
Wolfio, Aleman
(3),
el mas antiguo , mas conocido ,
y
mas completo de los
cursos modernos hasta de pocos aiios
a
esta parte.
Es
constante que puso Wolfio mucha .diligencia en la forma..
cioh de su Curso ,
y
que tuvo noticia de lo mas que pu–
blic.aron los Matematicos que le precedieron , conforme lo
a
4
estaa
(3)
Chrirtiani
Wolfii
gc, Elemmta Matheseo.r univer.rte.
Ginebra
1743.
cin–
co tomos
en
4;