730 / 912
~,4
.,
'
ELEMENTOS
F!g. guiente en 3
1 :
de tiempo la distancia aparenfe variaba
// 1
'
8
11
1
11
S
"
6
3 ,
uego vana
2
en
I
3 3.
e restara esta canti-
dad de
la
hora del primer cálculo
I
1
h
43
1
3
o'\ y sal-
d
á
h
1
11
1
·
· .,
d l
·1·
P
r
n
I
r
4
I
5
7
para e prrnc1p10
e
ec 1pse.
or
me-
dio de dos cálculos como este se podría trazar la. órbita
apare_nte de la Luna , pero de esto hablaremos bastante
en
el
método siguiente.
1
o
2
5
Este cálculo de las proyecciones
se
funda
en
dos supuestos , de los quales pende su sencillez;
es
á
saber,
que la altura de la Luna es la misma que la
del
Sol,
y
que
la
paralaxe es proporcional al seno de la distancia verda–
dera del Sol al zenit ; siendo así que es proporcional
al se~
-no de la distancia aparente de
la
Luna al zenit.
Cómo
se calculan los Eclipses
por
el
Nonagésimo.,
1
o
2
6
Q.yando se hace
uso
del
Nonagésimo (
8
5 6
)
en
el
cálculo de las paralaxes , no se. puede hallar. la dis–
tancia aparente de los, centros , sin averiguar la diferencia
aparente de longitud
y
latitud. Suponemos , pues , que para
un instante dado, s_e quiera
averigu.arla distancia aparen–
te de los centros del Sol
y
de la Luna ; es preciso cono–
cer para
el
mismo instante la paralaxe de longitud y la
de
latitud (
8 7 3 ) •
1027
Si la longitud
.de
la Luna fuere mayor que
la
del
nonagésimo , se deberá sumar la paralaxc de longitud
con la
longitud verdadera,
para
sacar la longitud aparente
de la Luna. Pero si la
longitud de
la Luna
fuere
menor
que