.
,
D
E
AS T R O NO
M
l ,.A.
La misma tabla de la equadon
del
tiempo qne
Fig.
señala la diferencia entre
el
tiempo verdadero
y
el tiemP,o.
.
.
medio señala esta di(erencia en ~iempo medio,
y
no
la
pue-
.
.
.
1
~e señalar
de
otra rp~nera. Con efecto .,
~i
sgpon~mo~
q1:1e
4aya entr_e el sol me.dio
y
el sol verdadero
una
distancia
de
:4
º ,
de qi9do que e,ntre sus paso~ por el. me~ídiano haya .de
haber una difere.ncia de mas .d~ un quarto de hora,_;
esta
di:-·
ferencia ~e ,un qµarto
4€
_hora .se ha
~e
co·nt~r ·del ~Jsmo
moqo que todos.los d~rná-s tiempos -de las tablas, por el
mis-:–
mo relrox ,
y
por la misn;ia escala que todas las revoluciones
, 1/
todas las .4uraciones de los movimientos ~e~estes;
se
de–
b_e ,. pues , contar
e.n
Jll~,n,u~os
de
tiempo medio.
_
5
9
_2 .
Verdad es que hemos de con,sider~r el tiempc>
_verdadero como el ÚtJi~o qt~e podemos observar , porque_
no
.
.
rYemos .mas qu~
el
sql v~_rdader9 que det_ermrna
el
tiempo
yeirdadero.
J,l~ro
no deb~ ~ervi¡ para medir . i.nterva_lo algun_c>
d.e tiempo,
sí
par~.hallar
el
tiempo medfo_, el ú
~i.coque nos
pueda gobernar ,
y
la v:erdadera med~da de la dur~cion~
, ..
5
9
3
Algunos ~~trónomos han toma':'lo pgr equací~~
del
tiempo
la
diferencia ~ntre
la.
ascension recta ,verdadera
y ,
la
ascension recta me~ia , convertid~ en tiempo
á
razon
de
I
5,º ·
por
hor;, tomando,
por
egemplo,
1
6
1
de tiempo po~
4~-
de di~erencia•., Pero
otrqs
Asrr<momos de much~ autorí–
·dad han_ t~nido
por
mas acert~qo reducir estos
4
º
á
ti~mpo
solar medio ,, que vienen
á
ser
1
5
1
5 7
11
4 , 1~
diferenci~
pued~ ~l~gar
á
s
~r.de2
11
6.
Pero Mr. de la L_ande _ha pro""'
bado_qu~
_la r~.4.l!.cc:i~tJ,
.4e
_los
gra_1~s ·
l
t!e~npo
~e
·debe
hacer
á
. _.
T~m.Vll,.
~Y
i
!:~