~º~
.
Ibid.
14.
nosotros:
El
tomará
de
-10
mio
,
di-i
ce el Hijo. Las-criaturas reciben su '
sér
de Dios ; pero nada toman
de·
,· ·
Dios : son sacadas de
fa
nada : el
Esp-iritu Santo toma de Dios,
co~
mo el Hijo , y es igualmente,
que
el
sacado de su sustancia,
Por
eso
no se puede décir, que ha sido cria..;
do: no lo permita Dios : Hay una
palabra consagrada para el
Espiri~
tu .Santo ; y
es ,
que procede del
Padre';
Verdad es , que tambien el
Hijo procede :
pero
su procesiofl
tiene un caráB:er distintivo , que es
el de
generacion
:
y
asi, para igua–
lar el Espiritu Santo al Hijo , bas–
ta excluír todo termino , que
d~
note creacion ;
y
escoger uno paí.
:ra
el que le
sea
comun con el Hijo.
El Hijo es engendrado : iPon- .
qué el Espiritu Santo no es engen·
drado tambien
~
No
escrudiñemos
las razones de esta diferencia in–
comprehensible.D1garnos
solamen~
te,
que si
Dios
tuviera
mu~qos.
Hi..t.
jos,
y
muchas
GeneraGi.ones , el
fü..