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lejos que
esté' de-mí, todas sus pa–
labras llegan
á
mis 01dos.
i
Quán–
tas conspiraciones semejantes he
desvaratado
?
2 Quántas vt;ces me
escapé de las manos de los Jadios,
quando me querian prender
?
Aún
pudiera tambien ahora evitar este
·golpe , no yendo al Huerto , adon–
.d~ ván á prenderme ; pero yá es
tiempo ,
yá
llegó la hora ;
y
mi
Padre me ha dado
·á
entender, que
de esta vez es preciso morir. Esta
es la hora . de mis enemigos ,
y ·
del
Luc. xxn •
poder de las tinieblas :
Levantaos,
53••
salgamos de aquí,
vamos
á
recibir
á
los que vienen á buscarme._
Las mismas palabras repite al
. Mar.
xxv1.
bajar del Monte Olivete;
y
quan-
46.
~do sale de su agonía:
Levantaos,
v(lmos, que
yá
se acerca el que me
vende.
No retrocede , antes camina
á
la muerte con una vuluntad de–
terminad~ ,
y
lleva consigo
á
sus
Discipulos :
Levantaos, partamos;
porque aunque su hora no haya lle–
·gado
~
qu~ere'
·no obstante, ·que-
le
si-