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bautismo en el
J
ordan , confesando
sus pecados. Pero viendo Juan muchos
Fariseos ,
y
Seduceos ,
dos sectas qu!
de varios modos corrompian
el
espíritu de
Ja
ley,
y
que venían
á
JU
bautismo, les
dixo : Descendientes
de
vívoras, ¿quién
os ha enseñado
á
huir la ira que ha de
venir? Haced, pues, fruto digno de pe–
nitencia,
y
no digais dentro de voso.:.
tros : tenemos por padre
á
Abrahan;
porque os digo, que Dios es poderoso
para hacer nacer hijos de Abrahan
d~
estas piedras. Ya esta puesta el h acha
á
la
raiz
del
arbol.
Todo ar
bol, pues, que
no
dá
fruto bueno, será cortado,
y
echa–
do al fuego. Yo
a
la verdad os bdlltizo en
el agua,
como
una preparacion
para
la
pe–
nitencia; pero el que ha de venir des–
pues de mí , es mas fuerte que yo,
que
no soy digno de llevar sus zapatos
p).
E
te es el que os bautizará en el Es-
,
píritu Santo ,
y
en
el
fuego
de la
(a–
ridad , que su bautismo comunica;
cuyo
bieldo está en ~u mano ,
y
limpiará su
h~–
(1)
S.
Joan.
Chrys.
Hom.
2·I.
in.Mar.