1
,.
•
1
f
'
LA
REALIDAD DE LA ESCRI1'·URA ARCAICA CI--iiNA
EN
BOLIVIA
1
1
Por Erich H ojj1nann S.
Deseoso de identificar los caracte"res de inscripciones encontr?. ··
dos en algt;tnas fracciones .de cerán1icas en varios lugares de este De-·
pr.rtatnento de Cochaban1ba, he sentido n1ucho la falta casi absoluta ,
de literatura para tal estudio y la gran dificultad de obtenerla de otros
,
.,)
\
•
1
patses. ,.
,. 1
Por esto he cambiado varias cartas con la Dirección del Museo
Nacional de los Estados Unidos de Norte-América en
·w
áshington
que había sido 'tan amable de pedir de algunas personas de valor cien–
tífico su opinión al respecto. Lastimosamente nd tne había .sl.do posi–
ble de convencer a dichos Científicos de lo verídico
y
de la importancia
de 'mi descubrimiento de que -contrarian1ente a lo supuesto hasta
ahorq. en los círcuios de conocedores de arqueología de Bolivia - - real–
lnente ha existido una escritura éntre los pobladores ,de este país.
En una última carta fechada el
28
de mayo del año en curso
el señor
I.
E. Graf, Secretario Asistente del mencionado Museo n1e
transcribe los puntos
de
1
vista del Dr. G. R. Willey del Bureau of Ame–
-rican Ethnologie, quien niega rotundamente la existencia de esctitura
<!ntre los nativos del Nuevo Mundo, porque: "hasta ahora no había
:sido demostrable su existencia". Pero la den1ostración de la existencí.::t
de tal escritura es precisamente el objeto de mi descubrimiento.. cabe
a
mí la comprobación del hecho.
.
Con este fin me permito acompañar el Iridice de Radicales de la
actual escritura ,chin'a, tomado del libro "Analisis of Chinesé Carac–
ters"', by G.
D:
Wilder and
I.
H. Ingram; College of Chinese Studies".
<..~omo
es conocido, la tpayor parte de estos Rad.ic.ales han sido tomados
..