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QUIENES ERAN LOS AYMARAS
Cuantos más relatos folklórÍCos se escriban so:-–
bre el origen, _organización social, religión y costumbr es
aytnar.as,. más y más difícil y complicado se hará el des–
cifrar y levantar el velo del misterio que cubre la proceden
cia de esta raza milenaria ; existen toda suerte de leyendas
caprichosas, supuestas y plagios de autores antigüos. En
realidad se ha escrito mucho
y
nada de verdad h ay en
ello. El espíritu inquieto del asiduo investigador de épo–
cas antiguas, el hábil y discreto historiador y el serio y
verás arquólogo, continúan sus árduas e insistentes in–
vestigaciones para poner término a tan importante te–
ma, mas nada positivo han logrado hasta ahora. Mien–
tras tanto continuaremos dando crédito a relatos y na–
rraciones, que merecen entera fe. En cuanto a 1os ayma–
ras se refiere,
éi
eminente historiador Don Luis S. Cres–
po, dice: El origen de la ·población del Chuquiabo, como
el. de todos los pueblos de la Amér.ica primitiva, es incier–
to y dudoso, permaneciendo hasta hoy envuelto en el
manto del misterio. Nada se sabe con certidumbre de
sus primitivos habitantes, ni de la raza a que pertenecie–
ron, así como se ignora su forma de gobierno y el estac:fo
de civilizaéión en que vivieron'.
Lo único que sobre el particular se sabe, es que
Chuquiabó fué una de las poblaciones más antiguas
per·~
ténecientes a la raza aymara, y que hacía parte. de la ju–
risdicción del Collao o Collasuyo, provincia in quiet a, be–
licosa y feroz, que vivía en continuas gue rras con las d -
más provincias más o menos feroces que la rodeaban, y
las cuales intentaror:i por muchas veces subyugarle, pero