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presumo qne su estudio es de gran iu teré.;; no splo
pR.M
nosotros sina
para todo aquel qne desea
conoc~r
á loo:; americanos
y
<'spe. ialmente
á
los p•,l'nann.-;.-De C;lnsi.;aien
t\3
•'ll) cr•! 1ré m ay af,n·tnn do si consigo
que 1
•R
extmHjero~,
qneanht>lan cnlti\·at·
el
qnechua. oncueJltt•en en
estn
;t>UJ!llé).
011omatópica un elementn po1leroso
y
tJt.i1 p:u·a
h
lijtno–
grafi<~
y
nn anxiliar para. la Hísb.ria
y
l<t G.)ogmfi:t tl <:" l pa.Í;;
tle
¡,,s In–
cas.
En cuanto
al
plan, es el mismo qne nos
en~eña.·1
JH'ecept.ista"
de
nota
y
de competencia ejocntol'iada sobre la materia; pet''' qne al s -
ñirme
á
su~
instmcciones, he procm·:vlo que
bR
t·egh~
eslén
explic<\–
Jas con toda la
claridad necesaria.
Rástame, def:pnes de todo lo tlieho, acl vertir solo, q ne, para l11. Irte·
jor inteligencia de esta obra, imperfecta todavía, por ciet·to,
he cni<la–
do anota.t' oportunamente las diecionos
y
fraces del idi01m1. e astelhtno
y
aún del latino, qne se han introtlncido por co¡ls<"enencia
t~tural de
la dominación ·española
durante tres siglos
largos e.n.
toda
la
América
Latina; pero que hoy: dia. aumentan el caudal 'de las voces
del hermoso habla quechua,_
...
EL
AUTOR
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