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Juan Cermeño; Don Pedro Puerto Carrero; r n·
cisco Maldonado; Don Balthasar d Ca tilla; Gr -
biel de Roja ; Martin de Florencia; edro d 1
Bar co· Alon o de Manjarre , ) Juan d a
v
dr ,
con otro . En el
e~tretanto
qu · andauan en e to ·
tunljulto
y
deuaneos en l a cibdad,
F~anci ~o
dt::
CªrauajaJ,, vezino della, viendo la locura qu
los vezino hazian y de como acriminauan mucho.
lo que el Visorrey cumplia en seruicio de Su Ma-
·es tad , le parescio todo ello muy mal.
Y.
por no
hallar se en estos trance tan pessados, tom l
dinero que t enia, que r a rico,
y
e alío ecret -
mente del Cuzco sin u
mu~;er,
y se fue a busc r
vn nauio a lo puerto de Lima, de Ha ari, de · a
y
de r equipa, con proposito de a lir e d la (1)
tierra
y
embarca r e para Ca tilla o para la Nu u
España,
y
de pue. boluer e a su ca ·a, acabados
los deuaneo ;
y
como no halló r caudo e qued
en Arequipa. Como Pi arro lo cono cie e ant
de agora que ra hombre de g ran cori jo, a si n
la paz como en la guerra, lo mandó bu car, por·
que no parescia en la cibdad,
y
dende a ci rto
dias upo como se auia alido huyendo la vía d l
pueblo de Condesuyo, y lue;o lo embio a bu car
con cierto hombres determinado , 1 qu l halla ·
ron en r equipa, desde donde le hizieron boluer
por fuen;a, porque no queria yr a do Gon a lo
i·
arro estaua, por no le e uir. iendo que cont ra
u voluntad 1 hazían boluer, a l o lo ojo al ci lo
con un emblante muy ayrado
y
lo ojo encarni-
( 1¡
T
acha.lo:
cibdad.