-6S
Cttr·tas
"de laJ
Mifsiones
nero rézado·
el
Evangelio;
pero
fu
gozo
fe
mudO.
p rc fio en
u~\a
trHl:e rnelancolia, viendo que el Pa..
dre
tenia
prccií1on
de , fepararfe
de
ellos.
Como
no podía
dilatar
fu partida,
quifieron
que
la
flor
de fu
juventud le acompañaífe
para
allanarle
el
camino'
·y
proveer de viveres
a
el '
y
a
fus compa..;
~eros
.. Haviendo marchado algunos dias en un ef–
p,efo bofque, por .una fenda eflrecha,
y
dificultofa,
perdieron (us guias ·el camino .,
y
por ·tnucho
tiem~
po
erraron
~ageando
por
los bof
ques ,
fin
faber .
donde iban,
y
fin hallar
para vivir, fino
las
hojas
de.
c·ierto arbol
~
y
algunas·
ra!ces
filveltres~~
En
tan.
grande aprieto,
acudio
el Padre al Arcangel San
' Raf1e1,
y a
los Santos -Angeles de Guarda ;
y
poco.
defpues,
qnando
men-OS
lo
penfaba, fe hallo
a
la
¡;merta.
del Lugar
de
los
Aruporecas
, donde
en
los ~
años
paíiados havia hecho Mifsion.
Tuvo el con–
fuelo de
hallar
en
efios Putb!os Ja
mifn1a
opoGc!on.
a
la Idolatria,
y
el .
tnifmo
defeo en
que
los
havia
dexado., de
profeífar la
Ley Chrift:iana. Gall:o
al~
gunos
dias en
in!l:ruirlos
otra vez ,
y
confirmarlos
en fus
buenos defeos,
y
luego profiguio fu camino.·
Haviendo atraveífado bgos, pantanos,
y
bof–
ques
'bol vio
a
perder
e'l
catnino ' fin
poder def–
cubrir
'el
.que debia
tomar. Havia oido
decir,
que el Lugar de los Indios
Bohocas
fe hallaba en
aquellos
parages , cerca
de
una
alta
montaña. Hi–
zo fubir un Indio
a
lo mas alto dé un 3tbol
a
ob~
fervar
el
Horizonte=
avifl:o
felizmente
la
montaña;
y
dirigieron fu
rurnbo
azia
-ella. Llegaron
mny
fa~tigados al Lugar , y
los bu.enos
Indios
nada omitie–
ron para fu
d~.fcanfo.
Se havia
I-lo(pedado
al Pa–
,,hc en una cabaña
n1uy
a!feada : encontro
en
ella
unas