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Cartas
de
las
Mifsionii
.que anuncie Jefu...Chrifl:o
a
eíl:e pobre Pueblo,
aun~ ,que
n1e
cueíl:e la vida. Hablaron en el
mihno
to...
no los Neophytos. HaviendQ partido Patozi,
to1no
· el Padre fu Breviario para rezar ,
y
entretanto
vio
de
repente
a
fu ladC? un Indio
muy
alto,
y
de un·
femblante ferio. Vi
endo el Barbaro el Libro ,
qu~
el Padre tenia en las
mln.os,
fe
imagino, que
con~
tenia el hechizo, que havia dexado fus brazos
fin
tnovirniento. Procuro arrancarfelo de las manos,
Y.
el Padre, reconociendo que era el Cacique del
I..u~
gar,
com·enzo
a
defengañarle de fu error. Le
ha~
· blo
de
los artificios
del
De tnonio,
qu~
abufaba
de
fu
credulidad
para
perderlos.
Trato
con
el
de
Dios
.Verdadero,
i
quien debemos nueil:ro
ser,
y
q~e fo~
lo
n1erece
nuefl:ras adoraciones;
y
le
expufo
la
Le~
.SJnta,
de cuya
obfervancia
depende nueíl:ra
fdici~
'dad.
Le
oyo
el
Cacique
fin decir palabra: luego
levantando
los hombros ,
fe
retiro
a
fu cafa' to:no
:un
puíudo
g(ande de flechas'· Y. las
llevo
a bo[j
que.
'
La
noche
Gguiente tuvo un gran Confejo
dé.
los Principales del Lugar,
y
entre ellos fe hallo el
Indio
So.nema.
Por
mucho tiempo
no
Cupieron
qu~
partido
tom~r
:
lo
fucedido
los
hacia temer , que
fedan inutiles los nuevos esfuerzos , que hicieífell
})ara 1natar al Mifsionero. Hablo entonces
Sonema;
y
haviendo dado los mayores elogios
a
la bondad,
y
dLtlzura del Padre,
les
hablo
con
tanta admiracion
de
las inrcrucciones que le havia oido de la
Ley
de
Dios,
que unanimemente
í
e
refolvieton
todos
a
bot..
yer al Lugar,y poner fe en fus manos. Salieron, pues;
de
los bofques ,
y
entran
do enel
Lugar,
fe eneami· :
~aron
en derechura
a
la
C.hq¿a de.l Mifsionero,
qu~- ·
los.