'íie la
Comj~-rj;/a
de Jefus.
3
4) ·
lncnfe ,
y
abandonaron con cobard!a. Eá algunas .
Chrifiiandades
firmo
el mayor
numero
las Aétas de
Apofiasia ,
diél:.:tdas por los Mandarines Locales.
Nos participan los Mifsioneros, llenos de amargu–
ra ·'
y
con las l2grimas en los ojos, la cobardia
de
n1ucha parte de fu
Reba'f1o.
Tal vez los
Chrifl:ianos
n1as
~illinguidos,
en cuy
á'
piedad,
y
fervor
havian.
muchas
veces fiado los Mifsioneros: los
mas ape""'
nas pudieron
hallar
afylo
para
ocultarfe
a
los
Mí-i
niChos.
Muchos,
aunque determinados
a
confeífJ.(
la
Fe'
no
ti~nen
VJlor
de recibir
a
otros en
fusca~
fas , por el
peligro evidente
de
arruinar fus
fami~
Has;
y
afsi
muchos
Mi
f.
ioneros, no
hall_ando
re
fu~
gio , tomaron el partido
de
ocultarfc en Barcos.,:
Lagos; y
Rios,
y
otros
fe
refolvieron
a
encatninar~
fe a MJcao. El P.1dre
Baborier
ha
fido uno de los
que tomaron eile
ultimo partido. Le
he
vill:o Ue..:
gar
a
efte buen
viejo
en la edad de
retenta
años; -
l1a
viendole
protegido la
Providt ncia en
un
viage
de.·
111as
de trefdcntas
leguas;
¡1ero
permitio ,
que
lle~
gando de noehe
a
Macao, para no caer en manos
de
1111
Cuerpo
de
Guardia ,
cotnpuefi:o de Chinos
,
fe
abrieífe el
pequeño Barco, que le llevaba
contra:
una roca.
Trepo
cotno
pudo
en las tinieblas fobré
\lna
Colina
efcarpada ,
y
al atnanecer nos embiQ
el Barquero con gran fecreto
a
pedirnos
vellidos
de
Europa.
Efie venerable
Mifsionero,
que
por
una
larga
ferie
de años fufrio todas las fc1tigas de
fLJ
minifrcrio'
no pienfa
fino'
en bolver
a
entrar_
en
la China
para n1orir, como
dice ,
con las
arn1as
e~
la
mano.
Pocos
dias defpues
llego
~ámbien
el
Señor.
Martillat , Obifpo
d~ ~~rioea,
Vicario
Apoftolico~
~~om. ~E.
· -
~ ~
:z