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't
Cttrtas
de
las Mifszones
lancia
de los Guardas , apofl:ados alli
p~ra
r •
giftrar los ,Barcos. Pero perftfriendo e1 tiempo .en
fet le contrario .• fe canso de efperar 'lifoogeando–
fe, ql;!e mediante .una corta fuma de dinero, que
daria
a
los Soldados, harían eíl:os una vi 1ta fu–
perficial,
y
le dexarian profeguir fu
viage.
Se ea–
gaflo
miferablemente :
detuvieron los Soldados
la
Barca ,
y
fin atender a las ofertas ·' que les fueron
, he-e has , procedieron al regifiro c-on tanto- rigor,
que
muy
en breve defcubrieron
a
los Mifsi·oneros,
aunque puefros en un rincon, donde apenas po–
dian L
r viíl:os. Fueron
llevados
a
los Tribunales
de los Mandarines de Guerra , que guardaban la
Cofia, exarninados an1pla1nente ,
y
encerrados
en. tHl
Cafiillo,
baíl:a
recibir las ordenes del principal
Man~
darin , que vivia a feis leguas de allí.
.
Los cito el
Mandarín
a
fu Tribunal·;
y
havien.;
dolos por largo tiempo examinado ,
~los
bol
vio
al
Baxel haíl:a nueva orden. Informo luego
a
los
pri~
meros Mandarines de la Provincia , que reíiden en
Canton, para tomar fu Confejo ,
y
fe
guiri
o.
- L~
refpuefia fue, que
~mbiaffe
con fegu.ridad los
Eu~
ropeos , y
los Tongkinefes
a
Macao,
y
los hi..
·cieífe
~fceltar
de
Ciudad en Ciudad por Ofici.ales .
de los Tribunales; y que en quanto al Patron del
Barco, le
entregaffe
a fu Mandarín , para que reci....
~
biefle el cafiigo proporcionadu. De efta manera les
Padres, defpues de padecidas tantas fatigas ,
y
mo..
lefrias, tuvieron el feotitniento de bol ver el
di
a 24·;
ce
·Dicie1nbr~
al
miflno
parage, de
donde havi an
part~ido
feis t]iefes
antes :
lexos de entibar
tan
tnal
iuceífo el z.elo d los MifS'ioneros
1
or una
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