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de
la Compa1lia Je
JeJus.
·
~-
·cion ;
y
donde
a
cada paífo fe defcubren nuevos
objetos, que; fon teíl:imohios rnuy tiernos del
amo~
infinito de Dios por la falvacion de los
hombres~ ·
Dichofo yo,
fi
tantos , y tan Santos
Monumentos~
que he vilitado uno defpues de otro , y cuya me-1
tnoria refrefco con frequencia , confervan ,en
mi
corazon el Efpiritu de piedad,
y
Rellgion , que
in(.;
piran.
Para cumplir con
mi
palabrá , prefento
a
V.
R~
)a Relacion de mi Viage ,
y
efpero que la recib-í..¡
ra
con1o una mueíl:ra de mi reconocimiento ;
per~
antes de COinenzarla, debo
adv~¡r
a v.
R.
qu~
fu efl:ylo llano,
y
fendllo debera todo fu
decor5~
a
la dignidad ,
y
fantidad de los Lugares , de
qu~
.voy
a
hablar. Nos embarcamos en el Puerto
de, .
Seyde , Ciudad .marítima de Phenicia.
Llamaba[~
intiguatnente
S
y
don
,
y
bien fabe
V. R.
que
teu~1
JllOS
alli una Mifsion muchos años ha.
·
No fali1nos del Puerto fin haver hecho
ánte~
muchas tentativas, para entrarnos
en
Altan1ar. Ma$
nos forzaban los vientos contrarios
a
bolver
a
en~
trar todas las veces que intentabamos falir ,
que~
riendo Dios en eíl:a ocafion ·enfeñarme que debía;
fujetar
a
fu voluntad la irnpaciencia
'q~e
tenia de.
llegar
a
Jerufalem, para afsiíl:ir
e~
la
Semana
San~
ta
a
la celebracion
de
nuefiros Auguíl:os
Myil:erios~
En fin, el
dia
7· de Abril de
171
3.
que era
Lu~
nes de la femana de Pafsion; nos hicitnos a
la
ve~
la con un tie.mpo n1uy favorable ,
y
una compa..;
ñia
de Peregrinos , quall
a pudiera defear.
La tar_,
danza de la partida hizo m.as
vivo el
gozo
que
tu~
\Ve de verme ·en
camino~
para
llegar
ª~
tenninq
~ue.
~an;~q !-!efeal?~
.
, .
_ .
'11.
l"
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