1 60
A
rnas
d~
fa
prueba
p o''r
escdrur.
S'
ror
~
srigns ,
y
la
confc_ion
d~l
re .
J i br~
ó
for7.~~la,
en
quu
J~,
)y;1ba
su acu
3
ion el \Js:al, se
usaba
tambkn en
Jo
anriguo
otra prutba, que ll.lmaban
ro mpur ga - ion~
Esta consistía
en obligar
al
reo
á
sincer
crse de
las
sospecl11s
que
con–
tra
él
habia , con el testimo nio de sugetos de ptob1dad,
quit:nes en
mayor
ó
menor
r~ úmero,
y
SJ ediaaHe jura–
memo afi rmab3n
tenerle por
ve rdadero
católic o ,
y
1
ibre
por lo mismo
de
Ja hereg ía que
se
1~
impotoba.
Basta
saber
que en la
I nq
uisicion
hubo
es
re
otro
género
qe
pruebas ,
para receJar desde
luego
un ·
nuevo
m:manrial
de
iojustici~s.
Eralo efeclivamenre h coro purgacion ,
pues
á
ell!l suje:aba
á
todos por qoalqu,ier
rumor
esparcido
contra su
creencia,
atln quando hubiese tenido principio
en b{)mbres viles ;
y
aunque
coosiase
de
posi1
i
vo
haber–
le
difundi-do
sus
mismos
enemigos (
16
t ) •
Todavía
no
era esto l_o peor; 'quando el disfamado no encontraba
quien le
abonas~
(
acaso
por
lo arrit!sgado
que
esto
era
en Jos procedimientos del [dbunal ) se le condenab3
co–
mo herege -contumaz (
a
6~
y.
A
esta
d-octri-na .,
aunq~e
del direc10rio
de inquisidores
~
no se pudo acomodar
su
comentador Peña , por
par~c~d5!
demasiado
at
~it
1
a1
ia
y
cruel;
Eym{"ric
sin embargo
la
funJa en
algunas decre–
tales
no sé .
yo
si con uzon, ni quiero
~ver!guarlo;
bastando
para
mi
ebjcto
el saber
que en
les casos
unl~a
estas
.Y
otras
especJes ,,
qu~
sabid2s
hubieran
evirado
gran–
des iñjusridas , las
callaba
la ·I.nquisícion ,
miénuas
cam-
paneaba
hs excocnoa:ones .
.
( 161 )
Eymeric,
!bid.
Pa,-t. Il. Qutf!st.
LPII.
- (
•6~
)
Id.
ib. Part. III. n.
145.
Peiia ,
Com.
XJiXVI/1,
..