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HISTORIA
:ECLESIASTICA
Sif!,l<' tros ,
nos
obliga
á
e ~ tim .-J. rla
mas.
XVII.
Hemos hablado de diferentes
coleccione
de ·
Cán~nes
que
se hiciéron ánres del
sigl~
XVI. Estas con1pilaciones notables
por
el tiem
po en que
apareciéron ,
y
á
pesar
de su im
perf~ccion,
preciosas tambien
por
muchas
con
sider.aciones,
no
eran
ya
sufi cientes
despue:
que
los
sabios
habian
contraído
el
buen
há·:
bito de
beber
en
las
fuentes.
Pretendiéror¡
tener
á
la
vista
las
actas
mismas
.de los
Con··:
cilios
Generales
y
particulares
en
toda
su
ex·~
tension :
y
para
juntadas ,
y
formar
de
ellas¡
colecc'iones
completas ,
hiciéron
averigu:1cio·~
ncs inmensas en las Iglesias , en
Jos M0nas ·1
·terios
y
en las Bibliotecas;
escudriñáron
to ~!J
dos
los dep6sitos ,
consuitáron
con mas
aten~
•
•
c1on
que
ñunca
todos los
Escritores
~nt
,
guos
y .
mooernos que hab1áron
de Conci·:
líos,
con la
esperanza
de
hallar
en
ellos
l:ui
señ.1les
y
notas
que
podia·n
conducir
par~ij
nuevos
descubrimientbs : no
perdorjáron
á
fa•¡
tigas
n~
á
gastos para
recuperar
las
actas;
que
no
ha bia ,
y
compJetar las que no
ha·\
bian
regado
á
nosotros sino en
paree,
y
con~
lagunas que·
era necesario
JJenar. La data
di
algunos Sínodos
era incierta ,
y
el
lugar
e ':
donde se
celebráron poco conocido :
muchas .
hacen
alusion
en
sus
regJ :1mentos
á
uc;os
do .
que no ha
bia
q uedado huella ,
y
otros
se.
sirven de
cxpre ~ iones
cuyo
sentido
plrece
.eq ul